Un puente es una construcción que permite superar el obstáculo físico que representa un río, un cañón, valle, camino o una vía férrea. De manera tal que sin su existencia, sería muy difícil vencer las dificultades que la naturaleza nos pone. También podemos ver un puente, como un instrumento de conexión entre dos puntos, que de no ser por él estarían incomunicados o inaccesibles.
El hombre ha construido diferentes clases de puentes que van
desde el más simple para uso de peatones, hasta otros mucho mas
imponentes, como el Puente Baluarte que está en México considerado el
más alto del mundo.
Así como estas construcciones han
ayudado al hombre a superar obstáculos naturales, de igual manera, Dios
ha provisto puentes para que podamos vencer nuestras dificultades.
El primer puente construido hacia Dios
es Jesús quien pagó un alto precio por amor, para que todos los que
creemos en su obra lleguemos primeramente a Él, Juan 14:6 dice: “Yo soy
el camino, la verdad y la vida; nadie puede ir al Padre si no es por
medio de mí.” Pero también para que tengamos vida eterna: “Pues Dios amó
tanto al mundo que dio a su único Hijo, para que todo el que crea en él
no se pierda, sino que
tenga vida eterna.” Juan 3:16. Por lo cual Jesús, es el puente que nos
conecta con Dios, de manera que no podríamos llegar al Padre sin El.
En los momentos de cansancio y frustración podemos usar el puente del
descanso “Luego dijo Jesús: «Vengan a mí todos los que están cansados y
llevan cargas pesadas, y yo les daré descanso.” Mateo 11:28 NTV,
depositar nuestras aflicciones en oración y recibir a cambio paz.
El puente del perdón es el que debemos
usar a diario, para no acumular resentimientos ni culpas, esto nos
garantiza estar limpios de conciencia, 1 Juan 1:9 “pero si confesamos
nuestros pecados a Dios, él es fiel y justo para perdonarnos nuestros
pecados y limpiarnos de toda maldad.”
Cuando nos equivocamos y creemos que no
merecemos nada, Hebreos 4:16 es el puente de la gracia. “Acerquémonos,
pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y
hallar gracia para el oportuno socorro.”
Si te sientes enfrentando obstáculos que
parecen infranqueables, si llegaste a un punto en el que ya no puedes
avanzar, si te sientes atrapado por tus circunstancias, necesitas un
puente.
Sí, un puente que te ayude a superar
cada problema, pasar por encima de tus propios límites o los que
quisieron imponerte. El puente se llama Jesús, al caminar con El puedes
pasar por encima de lo que antes era un obstáculo insuperable para tu
vida.
Cuando pienses que ya no tienes salida, o
bien que no sabes de que manera atravesar un momento difícil, deja que
Jesús con su amor y poder sea tu puente de esperanza.
Me encanta, es maravilloso entrar en la esencia humana de nuestros semenjantes. Me interesan sus libros. Acabo de descubrirlos y pronto los leeré. Siga hacia adelante simpre aunque mire hacia atrás continuamente. Sin ser adivino estoy seguro de que un mundo de éxitos le esperan porque se lo merece.
ResponderEliminarMuchas gracias por leerme!!
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